El vuelo de los pájaros, las sábanas de la abuela, los bichitos y demás misterios de las rosas, la desertización, la deforestación, el cambio climático, eso de ser mujer, todo lo que da vueltas en mi interior como en el interior de una lavadora, queda en pausa, unas cosas caen sobre las otras, escurren unas sobre otras, empapadas todas en la misma sustancia líquida. Las saco una a una, las estiro, las extiendo. De una a otra, la mirada me lleva a un paisaje diferente, como esos lugares de los sueños que conocemos solo a medias. Mirada errática, pensamiento errático. 

Ángela Nordenstedt (1963) es una artista multidisciplinar que vive y trabaja en Madrid. Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense, asistió a talleres con Gerardo Vera, Eva Lootz, Jiri Dokoupil, Miguel Ángel Campano y Christian Boltanski. En los noventa formó, junto con el pintor Alberto Sánchez, el colectivo Köniec, dedicado al mail-art, ediciones de artista y acciones. Ha expuesto individualmente con las galerías Fúcares y Depósito 14 en Madrid, Rosa Hernández en Alicante y La Calcografía en Salamanca, participando en ferias como ARCO, MIART o Art Miami. Su obra puede encontrarse en las colecciones Caja Burgos y Caja Madrid, la Colección Testimoni de la Fundación La Caixa y la colección de la Fundación Ortega y Gasset, entre otras. 

En su obra realiza frecuentes cambios de registro motivados por los intereses del momento, aunque se mantiene el uso de materiales sencillos o reciclados, las referencias al mundo natural como metáfora de la idea con la que juega en la obra y la voluntad de combinar opuestos, como impulso y control, delicadeza y tosquedad, discurso e imagen.